Actividad 3 modificada

El principal objetivo que nos fijaremos como docentes, tanto para el niño de 2º, 4º y 6º de Primaria va a ser la de mejorar la competencia caligráfica. Esta actividad va dirigida a todos aquellos alumnos que tengan mala letra, es decir, con errores en el trazado y menos evolucionada que la del resto de compañeros de clase.

Una vez que los niños son capaces de trazar todos los grafemas adecuadamente la escritura manuscrita seguirá entrenándose con el fin de que esta sea legible y clara.

El docente debe tener en cuenta las tres etapas o fases por las que pasa el aprendizaje de la escritura:

-          Fase preparatoria: los dos primeros años de Educación Infantil. El docente prepara al alumno para el control grafomotor.

-          Fase caligráfica: dedicada al aprendizaje de los grafismos de las letras.

-          Fase de perfeccionamiento: el niño personaliza su escritura.

Los factores principales por los que el alumno puede tener mala letra son: la postura, la presión que ejerzan con el instrumento que utilicen (lápiz, bolígrafo, pluma estilográfica…), el movimiento gráfico… Dependiendo del refuerzo que necesite cada alumno así se trabajarán más unos aspectos u otros.

Tanto en los alumnos de 2º, 4º y 6º de Primaria inspeccionaremos:
La postura que adoptan al escribir. Tendremos que explicarle al alumno la importancia que tiene el adoptar una postura adecuada a la hora de escribir no solo para conseguir que mejore la caligrafía, sino para adquirir buenos hábitos que evitarán alteraciones y dolores de espalda. Así por ejemplo le explicaremos que entre la mesa y la silla debe existir una distancia adecuada. También hay que tener en cuenta la disposición del papel, ya que dependiendo de la inclinación de éste, la postura cambiará y habrá que indicarle al alumno la colocación más cómoda. La mano que no escribe siempre sujetará la hoja de escritura.

La espalda estará recta, alineada respecto al respaldo de la silla y se evitará acercar la cabeza al papel.

La postura adoptada a la hora de escribir parece un factor poco importante, sin embargo es imprescindible, fundamental para que la letra pueda empezar a mejorar.

La presión. Los dedos y las manos deben estar relajados. El niño deberá hacer una pinza con el dedo índice y pulgar, apoyando el lápiz en el dedo corazón, pero sin hacer demasiada presión.

Material. Deberemos ir probando si el alumno escribe mejor con lápiz o con bolígrafo. No es aconsejable el uso de lápices duros porque escriben con trazo grueso y con color débil. Se recomienda utilizar el lápiz blando número 2.

Es importante elegir el formato de la hoja adecuada. Las hojas cuadriculadas no son las mejores para que el alumno mejore su letra, ya que les produce desorientación. El papel con renglones es el mejor porque las líneas ayudan a enderezar la letra en vez de inclinarlas, aún así iremos viendo cuál es el tipo de hoja para cada niño.

Lo que no debe de hacer nunca el docente es borrar o arrancar las hojas de los escritos de mala calidad, porque con ello, debemos disminuir la motivación del alumno a la hora de escribir.

Alumno de Segundo de Primaria

Argumentación que haremos al alumno de Segundo de Primaria para que se esfuerce y entrene.

La mejor forma que tiene el docente para hacer ver al niño que no tiene buena letra es conocer sus intereses y basar en ellos actividades de refuerzo.
María es una niña de segundo de Educación Primaria  a la que le encanta la música y bailar. La vemos todos los días en el patio con sus amigas dirigiendo coreografías y cantando.

María tiene una letra ilegible y para que ésta mejore, sin sentir ninguna presión ni obligación escolar, le vamos a proponer que elabore un cancionero que recopile las canciones de sus artistas favoritos y, una vez terminado, podrá enseñarlo a sus compañeros y jugar con él. Para ello, le explicaremos que tiene que mejorar su letra porque de esta forma sus compañeros la entenderán mejor.

De esta forma hemos motivado al alumno, el cual no va a tomar este trabajo como actividad escolar. Aún así se realizará una revisión de su caligrafía.
Le aseguraremos que, si somos constantes en las actividades, al final del curso entenderemos correctamente lo que escribe, y sus amigos y familiares también lo entenderán.

Tipo de material que vamos a utilizar con el alumno de segundo de Primaria.

El cancionero lo realizaremos en hojas con pauta Montessory para marcar tanto el tamaño como los límites de la letra escolar, así como delimitar los márgenes.
La herramienta de trabajo que va a utilizar es el lápiz número 2 porque es blando y su trazado no es grueso.

 

Proceso de trabajo.

María tendrá que dedicar 15 minutos diarios a la elaboración de dicha tarea. Le explicaremos que una vez terminado el cancionero, se encuadernará para que lo vean todos sus compañeros.
En estos últimos 15 minutos de clase, María irá escribiendo por párrafos la letra de sus canciones preferidas, lo que dé tiempo en los 15 minutos, sin presionarla porque de lo que se trata es que sea consciente de la importancia que tiene hacerlo con buena letra.

 

Alumno de Cuarto de Primaria

Argumentos que daremos al alumno de Cuarto de Primaria para que mejore su letra.

A un alumno de cuarto de Primaria ya le podemos explicar que la escritura sirve para comunicarnos, de tal forma que si nuestra letra es ilegible, nos aislaremos, pues el resto de las personas no entenderán lo que queremos transmitir.
Carlos es un alumno de cuarto de Primaria que tiene una mala caligrafía. Conversando con él hemos llegado a la conclusión de que es un gran aficionado a una serie de televisión, por lo que he visto aquí un posible recurso para que trabaje su letra. Le he propuesto que todos los días, 15 minutos antes de terminar el horario escolar, describa a uno de los personajes de dicha serie. Una vez acabada la descripción de todos los personajes, podremos publicarlo en el periódico del colegio para que todos sus compañeros lo lean. Pondremos como condición indispensable su buena caligrafía para que no les resulte difícil a sus compañeros la lectura.

Siempre tendré que esforzarme en reforzar su trabajo y recordarle si lo está haciendo bien o, por el contrario, debe mejorarlo.

En este curso ya podremos darle a elegir entre distintos tipos de letra para que vaya formando su identidad.

Tipo de material.

En este curso ya introduciremos el uso del bolígrafo, por lo que ya tienen que fijarse más, pues este no puede borrarse y el cuaderno podría quedar lleno de tachones, los cuales ensuciarían la hoja de trabajo, por lo que tienen que tener más cuidado. Además, respecto al texto, podremos ir haciendo que la extensión del escrito sea más amplia.

La hoja también cambiará respecto al alumno de segundo de Primaria. Se utilizará hoja pautada con doble línea, para ir poco a poco pasado a utilizar la hoja pautada con línea simple.

 

Proceso de trabajo.

Estos ejercicios se realizarán durante tres o cuatro veces por semana, haciendo una descripción por sesión dedicándole un máximo de 15 minutos en cada una de ellas. Lo verdaderamente importante es que los ejercicios sean motivadores y que gusten al alumno, porque de lo contrario, no los llevarán a cabo.

Alumno de Sexto de Primaria

El  alumno que está en Sexto de Primaria tiene la necesidad de personalizar su letra, pero esto no significa que esta sea ilegible y fea. De ahí la importancia del papel del profesor para que le guíe en la elección de su letra y que esta sea legible y clara. Recalcaremos también la importancia de mantener la limpieza de su escrito.

Mario es un niño de 12 años muy responsable en los estudios, pero tiene su cuaderno sucio, con tachones y una escritura ilegible. Primeramente hablaré con el sobre el cambio que va a experimentar el curso siguiente: entrará en el instituto, por lo que este problema puede ocasionarle dificultades para aprobar. Por todo esto es fundamental que ponga una solución antes de terminar el curso. Una vez que Mario sea consciente del problema y de que debe poner solución, le propongo el siguiente reto: teniendo en cuenta que su asignatura favorita es Educación Física, le pediremos que prepare por escrito distintos juegos con sus reglamentos correspondientes dándole libertad de elección. Una vez terminada la recopilación de juegos, le pediremos que lo plasme, de manera organizada, en un cuadernillo para entregárselo al profesor de Educación Física y que éste elija entre todos los descritos los más interesantes para ponerlos en práctica durante su clase.

Creo que esta actividad le motivará bastante, pues serán sus propios compañeros los que van a trabajar con los ejercicios propuestos por él, pero para que valoren este trabajo, entenderá que tiene que mantener una buena caligrafía.

De una forma continua, iremos revisando el cuaderno escrito por Mario y le iremos aconsejando si es necesaria alguna mejora. Siempre debemos alabar el esfuerzo que está realizando.
Debemos asegurarles que, si son constantes en su trabajo, evitarán sus errores caligráficos, la falta de orden y de limpieza, aprenderán a respetar los márgenes… y de esta forma su trabajo resultará más agradable a la vista de todos. Con esta explicación les motivaremos aún más para que su escritura mejore.

Material

Para llevar a cabo este trabajo, el alumno eligirá el tipo de letra que más le haya gustado entre todas las mostradas por su profesor.
Al igual que los alumnos de Segundo y Cuarto de Primaria será fundamental que el alumno de Sexto adopte la postura adecuada para escribir, así como el tipo de papel que va a utilizar. Utilizará hojas con una pauta de línea simple y escribirá con blígrafo.

Tanto en segundo, cuarto y sexto, debemos recalcar la importancia que tiene tener una postura adecuada sobre los dedos sobre el bolígrafo/ lápiz y la presión que se ejerce entre él y el papel.

Proceso de trabajo

Procuraremos que este trabajo se realice 15 minutos antes de terminar la jornada escolar, pero con esta edad, le podemos pedir que continúe con dicha actividad en casa, eso sí, siempre revisando al día siguiente la tarea realizada, por si hay que corregirle en algo.
 

Evaluación y refuerzo del profesor

La evaluación del alumno sobre su progreso en la letra incluirá el examen de la postura que utiliza al escribir, la presión ejercida sobre el instrumento de escritura.

La evaluación se llevará a cabo teniendo en cuenta los objetivos educativos establecidos y debe ser un proceso continuo que nos permita ir corrigiendo los errores del principio y conseguir la evolución y maduración del alumnado.

En la evaluación, el docente tendrá que ir haciendo informes en los que relacione las actividades con el momento o nivel de aprendizaje en el que se encuentre el alumno.

Empezaremos haciendo siempre una evaluación inicial en el primer mes del curso escolar, para conocer de donde partimos y las dificultades del alumno que tiene este problema. Solo de esta forma podremos establecer las medidas de refuerzo.

Haremos un seguimiento diario del trabajo realizado por el alumno y siempre tendremos en cuenta su esfuerzo personal.

El docente siempre evaluará teniendo en cuenta el ritmo y el nivel de cada alumno, es decir, que hará una evaluación individualizada.

El profesor deberá mejorar la autoestima del alumno con problemas en la escritura impulsándole para que siga adelante y consiga sus expectativas. Para esto es fundamental que se trabaje con actividades para el alumno.

Debemos animar a los alumnos a desarrollar la habilidad de la autoevaluación comparando los ejercicios que han hecho al principio de curso con los actuales. Esto les motivará a seguir trabajando y mejorando.

El profesor revisará el trabajo y su progreso. Para ello guardará todos los ejercicios que vaya haciendo el alumno e irá poniéndoles fecha para más tarde comparar los primeros y los últimos.